La carambola es una fruta exótica de clima tropical que no solo tiene forma de estrella sino que es tratada como tal. Muy cotizada en el mercado es usada para elaborar los platillos más exclusivos.
Se la conoce de diversas formas: cinco dedos; tiriguro; caramboleiro; tamarindo chino o tamarindo dulce.
Su origen se remonta a Indonesia y Malasia, pero actualmente se la cultiva en países de clima tropical de Asia y América. Pertenece a las plantas Oxalidáceas, y junto con el bilimbín, son las únicas frutas que provienen de estas especies.
De la fruta lo que más llama la atención es su forma estrellada, es pequeñita y tiene una piel muy finita de tonalidad dorada y amarillo-anaranjada cuando está madura. Su pulpa es sabrosa, suave y crujiente.
Muy jugosa la carambola tiene un sabor agridulce y no posee casi semillas. Aporta pocas grasas y contiene escasos hidratos de carbono por lo que resulta ideal para dietas restringidas en calorías.
Es rica en oxalato de calcio y fibra soluble, también posee una cantidad moderada aunque importante de betacaroteno y vitamina C, pero es rica en potasio.
Por su acción antioxidante es ideal para incluir en la dieta de todo mundo, pero sobre todo para los niños, Deportistas y adultos mayores como también embarazadas.
Está recomendada además para diabéticos, hipertensos y cardíacos pero no es muy apropiada para quienes padecen de insuficiencia renal y tienen que llevar una dieta controlada en potasio. Tampoco está indicada para personas con cálculos oxalato cálcicos.
Al ser rica en fibras solubles es idónea para contrarrestar la constipación siendo una especie de laxante natural.
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